El regalo más grande!

Ayer tuve la oportunidad de cambiarle la vida a alguien y abrirle un panorama que, espero, le alimente el alma tanto como a mi.

Liverpool Satélite, 14:45 hrs: Pasamos mi sobrino Santiago, su papá, mi papá y yo por el departamento de electrónica, el pequeñito en su carreola... Justo frente a él, un jovencito solicitando que le mostraran una guitarra eléctrica.... Fascinación, emoción y casi tortícolis al Santi.... Mientras seguimos caminando, él casi se sale de su carreola, por ver tan increíble instrumento... Gritaba, agitaba sus brazos, tratando de alcanzar, palpar y sentir ese pedazo de madera sólida TAN llamativo...

Mi papá y yo no lo podíamos creer... a sus grandiosos 16 meses, podía ya entender, muy en su forma, lo que una guitarra puede ser y hacer por la vida de alguien...

El incidente pudo haber pasado por alto, de no ser porque precisamente en casa de mis padres, guardo mi muy particular evolución guitarrística, salvo la morena de la que ya les he platicado, y que sigue tras mi silla en la mazmorra esperando salir.

Mi primera guitarra fue un tipo requinto, muy chiquito, que mis padres me regalaron cuando tenía como 6 años, y mi madre me llevaba a clases al YMCA... Creció conmigo un tiempo y tuvo que dar paso después a instrumentos más de tamaño natural.

Después de su siesta vespertina, Santiago veía la televisión con sus padres y su nueva hermanita, MariJo. Al despedirme, decidí otorgarle mi primera guitarra.

Amigos, de verdad que no podría describir la emoción de Santi al ver el instrumento... Gritaba, agitaba sus brazos, volteaba a ver a su papá con una luz en sus ojos que iluminaba el cuarto completo y mucho más allá.... iluminó hasta mi alma....

Cuando me acerqué a él, extendió sus manitas para tomar la guitarra, sin cuerdas todavía, y con una gran necesidad de mantenimiento, y como si ya supiera su posición correcta, se la puso en su pierna y comenzó su rasgueo... Seguían sus gritos de emoción y una sonrisa ENORME....

Su mamá le pidió que me diera las gracias.... Creánme: Es uno de los abrazos más efusivos que he recibido en mi vida, de personas tan pequeñitas como él....

Sentí la compulsión vocacional de capturar en una foto ese instante, pero decidí mejor guardarla sólo en mi memora y en la de Santi, PARA SIEMPRE.

La eminencia del ignorante

¡Ay de aquel que piense, que entre menos sensible sea a los demás, menos vulnerable se vuelve!

Me sorprende cada vez más darme cuenta la vehemencia con la que las personas de mi entorno defienden su forma de pensar, ensalsando su forma de vida, y menospreciando y criticando la de los que no somos como ellos... ¡POBRES! aparte piensan que así son mejores!

Y bueno... después de recién haberme mordido la lengua, dejo un gran saludo para los que aterrizan por acá a divagar conmigo, celebrando que sigo vivo y que tuve los dos minutos que pude sustraer de mi quehacer, para escribir esto.